El ciclo vital de la mariposa

Orientaciones:

-Discutir en el aula el concepto de ciclo vital.

-Pedir a nivel general que los alumnos pongan ejemplos de algunos seres vivos y las características de sus ciclos (años, transformaciones, etc.).

-Abordar el ciclo vital de la mariposa (a través del esquema presentado en el material, bien facilitando uno a cada alumno o proyectándolo para todos).

-Favorecer la reflexión a través del ciclo vital de la mariposa con preguntas como: “¿Qué cambios hay en el ciclo vital de una mariposa?”, “¿Qué es una metamorfosis?”,  “¿Es igual el ciclo vital del ser humano que el de la mariposa?”.

-Terminar relacionando el ciclo vital de la mariposa con el del ser humano a través de sus semejanzas y diferencias.

Apoyos inclusivos:

-Para facilitar la generación de ejemplos de seres vivos y las características de sus ciclos vitales se puede pedir que acudan a experiencias personales relacionadas con mascotas, plantas, etc.

-Realizar preguntas a lo largo de la exposición del ciclo vital de la mariposa para verificar la comprensión por parte de los alumnos.

-Animar a participar en la discusión a aquellos alumnos que tengan más problemas de comunicación, a través de preguntas directas y concretas.

Art Direction

Orientaciones:

-Iniciar la clase preguntando a los alumnos si conocen lo que es un “árbol genealógico”.

-Explicar el concepto de “árbol genealógico”.

-Citar algunos “árboles genealógicos” famosos como los de familias reales, los dioses olímpicos o el de Confucio, cuya genealogía familiar conocida abarca más de un millón y medio de descendientes así como unas 85 generaciones.

-Dar a cada alumno una hoja impresa con el “árbol genealógico” para rellenar y explicar la tarea: “Tenemos en la hoja nuestro propio árbol genealógico, en la que ahora tendremos que escribir (si no cabe en el árbol genealógico, escribirla en el reverso de la hoja, y en el árbol tan solo el nombre o una foto del familiar) la información que ya sepamos relativa al nombre y apellidos de nuestros padres, abuelos y bisabuelos, así como la fecha de nacimiento y fallecimiento, en su caso, y su perfil profesional (de qué trabaja o trabajaba…)”. Es recomendable comenzar por el propio alumno y seguir de mayor a menor grado de parentesco.

-Se puede acabar la actividad en el hogar preguntando a sus familiares y traerla la próxima sesión.

 

Apoyos inclusivos:

-Realizar un apoyo individualizado a los alumnos que lo requieran.

-Se puede acudir a páginas web con árboles genealógicos para comprender mejor sus características a través de ejemplos concretos.

Los cambios

Orientaciones:

-Hacer preguntas al grupo sobre los cambios que hay a lo largo de la historia de una familia partiendo del ejemplo de los árboles genealógicos.

-Introducir que a lo largo de la historia no solo cambian las familias, sino también los países y su denominación, las ciudades, los monumentos… y cada persona a lo largo de su ciclo vital. Se puede indagar, a través de explicaciones sencillas y con un lenguaje claro del docente, la característica transversal a todos estos fenómenos: el continuo cambio y transformación.

-Hacer grupos de 3 alumnos y rellenar en una hoja los cambios que piensen que ha habido y habrá en una ciudad, monumento, edificio, persona, etc. a elegir en el grupo (unos 15 minutos).

-Elegir un representante en cada grupo y llevar las reflexiones al grupo-aula para su debate en conjunto.

 

Apoyos educativos:

-Durante la discusión en grupos se puede estimar la posibilidad de que estos sean heterogéneos, o de que el docente de apoyo esté en un determinado grupo por requerir una mayor intensidad de apoyos.

-El representante de cada grupo no tiene por qué ser el alumno de mayor capacidad cognoscitiva, de forma que el docente puede mediar en la elección de cada representante y favorecer que todos los alumnos participen en el proceso.

-En aquellos grupos en los que no surja, durante la discusión en grupo, ningún monumento, ciudad, persona, etc. sobre la que reflexionar los cambios, puede proponer el docente algunos concretos, teniendo en cuenta la significatividad que tengan para los alumnos.

¿Qué me llevaría?

Orientaciones:

-Plantear que en esta actividad los alumnos tienen que imaginar que tienen la misma situación que José (actividad anterior); es decir, que tienen que emigrar a otro país.

-Indagar en los sentimientos que tienen los alumnos del programa al ponerse en el lugar de José.

-Dar un ejemplar a cada alumno del material para realizar la actividad.

-Explicar que la actividad consiste en ponerse en el lugar de José haciendo la maleta para emigrar a otro país, o en pensar que son ellos mismos los que tienen que emigrar.  Los alumnos tienen que escribir o dibujar dentro de la maleta las tres cosas que se llevarían a otro país si tuvieran que emigrar o si estuvieran en el lugar de José.

-Al finalizar la actividad, plantear cuestiones para tratarlas en grupo como: “¿Qué habéis puesto en la maleta?”, “¿Por qué habéis puesto…?”, “¿Qué cosas que no habéis puesto en la maleta creéis que vais a echar de menos?”, “¿Cómo os habéis sentido al imaginaros en esta situación?”, etc.

 

Apoyos inclusivos:

-Apoyar individualmente a aquellos alumnos que tengan más dificultades en la realización de la tarea, poniéndoles ejemplos concretos o dándoles una lista de cosas que pueden llevar para que elijan tres.

-Valorar si para los alumnos es más fácil ponerse en el lugar de José o imaginarse en esa situación a él/ella mismo/a, y plantearle la actividad de forma que pueda comprenderla más fácilmente.

-Facilitar a los alumnos que lo precisen pictogramas con objetos que puedan incluir en la maleta.

El emigrante

Orientaciones:

-Explicar qué es un emigrante y poner algunos ejemplos que faciliten la comprensión de dicho fenómeno.

-Repartir la lectura “El emigrante” y comenzar a leerlo, el docente o los propios alumnos, en función de sus características y competencias relacionadas con la lectoescritura.

-Una vez leído el texto iniciar un debate con preguntas como: “¿Qué le pasa a José?”, “¿Por qué se va a vivir a otro país?”, “¿Qué está dejando atrás José?”, “¿Por qué le duele irse a vivir a otro país?”, “¿Qué ilusiones tiene José?”, “¿Qué pérdidas tiene José al emigrar a otro país?”, “¿Cómo se siente José?”, “¿Cómo os sentiríais vosotros si fuerais él?”, ¿Cómo creéis que se siente la familia de José?”, etc.

-Sintetizar en unas breves conclusiones las reflexiones que los alumnos hayan realizado en el debate.

 

Apoyos inclusivos:

-Asegurarse de que todos los alumnos comprenden el término “emigración” aumentando el número de ejemplos, con el apoyo de iguales o a través del análisis de libros o películas conocidas que aborden el fenómeno de la emigración.

-Realizar preguntas, a lo largo de la lectura del relato, que permitan valorar al docente el grado de comprensión del texto en los alumnos del programa.

-Utilizar, si fuera necesario, lenguaje aumentativo o alternativo, usando por ejemplo gestos que apoyen la lectura del texto o un mayor número de imágenes relacionadas con la emigración.

Historia:

José es una persona de 30 años que vive en Ecuador. Tiene una casa muy pequeña en la que vive junto a su mujer y sus dos hijos.

La familia de José vive en unas condiciones muy difíciles. Apenas tienen pan, agua y leche para comer cada día. Tan solo una vez a la semana se pueden permitir comer carne, porque casi no tienen dinero para comprarla.

José quiere mucho a sus hijos y a su mujer. Le gusta mucho el pueblo en el que vive, ya que allí tiene muchos amigos.

Sin embargo, su familia tiene muy pocos recursos para vivir. José habla con su mujer y decide emigrar a otro país para mandar dinero a su familia.

Le da mucha pena porque no va a ver a su familia en mucho tiempo, y porque va a ir a vivir a un país desconocido. Lo va a “dejar todo atrás”.

Pero tiene la ilusión de poder ayudar a su mujer y a sus hijos a que tengan una vida mejor.